Mas Campassol es una gran Masía que data del siglo XII, completamente restaurada y con todas las comodidades, situada en el Parc Natural de la Zona Volcànica de la Garrotxa, rodeada de 43 hectáreas de prados, jardines y bosques, que la convierten en un paraíso de belleza natural.
Esta Masía Eco-Rural es un proyecto estratégico de la empresa inversora inmobiliaria Pevemar, que apuesta por el futuro enfocando el ecoturismo y el cuidado del planeta como ejes centrales de su actividad. Más que un valor añadido, la sostenibilidad se está convirtiendo en una exigencia en el sector turístico. Parte de la certeza de que es posible fomentar un turismo respetuoso con el medio natural, compatible con el ecologismo y con la economía sostenible.
Pero este es sólo el punto de partida. La alianza estratégica de Mas Campassol con la Fundació Empatia aporta a este proyecto ecológico algo imprescindible: la solidaridad. La Fundació Empatia, dedicada a la sensibilización y protección de animales, naturaleza y biodiversidad, ha establecido su sede en Mas Campassol al ver en el entorno del Parc Natural de la Zona Volcànica de La Garrotxa el lugar idóneo para desarrollar sus actividades.
El corazón de la fundación es el refugio de animales rescatados. Junto a ellos y con la ayuda del bosque de flora atlántica y mediterránea y el huerto ecológico, diseñan actividades de concienciación para con la naturaleza y sus habitantes. También desarrollan intervenciones Green Care destinados a niñas y niños, (también aquellos en situación de vulnerabilidad), para favorecer la protección y el respeto por los animales y la naturaleza.
Conocer para proteger
En tiempos en los que aparecen trastornos por déficit de naturaleza en parte de la infancia que crece en grandes ciudades, desconectada del entorno natural, la necesidad de una aproximación a este medio y una reconexión con árboles, plantas y animales se hace más que evidente.
Cuanto más apreciamos algo, más lo protegemos; por ello este proyecto busca mostrar y acercar las personas a la naturaleza. Desde diferentes vertientes, para que todos encontremos un punto de conexión y juntos preservemos mejor este maravilloso planeta que está en peligro y que compartimos con muchos otros habitantes silvestres.
Acción social para empresas conscientes
El proyecto no tiene ánimo de lucro, destinando Pevemar los beneficios de la Eco-Masia a la Fundació, convirtiéndose este en el activo más importante de su Responsabilidad Social Corporativa (RSC).
Esta sinergia transforma Mas Campassol en el lugar ideal para empresas, atraídas tanto por la Masía y su excepcional entorno, como por sus posibilidades de acción social. Las instalaciones en plena naturaleza cuentan con los equipamientos necesarios para conferencias con vistas privilegiadas y la posibilidad de alojamiento para grupos.
El entorno permite la realización de múltiples actividades al aire libre que cohesionarán el grupo, ya sea con salidas guiadas por volcanes, rutas en bicicleta, viajes en globo, visitas a pueblos medievales o increíbles saltos de agua en pozas naturales. El fomento de la creatividad lo aseguran los baños de bosque y la conexión con la naturaleza. Este es también uno de los fuertes de la Fundació Empatia, que puede realizar actividades de Voluntariado Corporativo y Team Building, ya sea en el huerto ecológico, a través de la interacción con algunos de los animales, o con las infinitas posibilidades que ofrece el impresionante entorno.
Actividades a medida
La amplia oferta de talleres a medida incluye temas como public speaking, alimentación saludable, ecología y reciclaje, horticultura, protección y fomento de la biodiversidad y salud física y espiritual.
La Fundació Empatia ofrece a los departamentos de RSC la colaboración en los proyectos sociales de Green Care, favoreciendo la salud de niñas y niños en situación de vulnerabilidad, su inclusión social, así como la protección del medio ambiente y la biodiversidad. El objetivo es establecer alianzas estratégicas con empresas creando junto a ellas el valor compartido que permita mantener relaciones duraderas y fructíferas, mejorando el clima laboral y favoreciendo la implicación de los colaboradores y su orgullo de pertenencia. Porque, al fin y al cabo, a todos nos gusta ser partícipes de un proyecto social y medioambiental, mientras disfrutamos de un entorno natural atractivo y saludable, tanto para el cuerpo como para el alma.