Infancia, animales y naturaleza. Estos son los pilares en los que se basa nuestro proyecto con la Fundació Empatia. En un contexto de emergencia climática y miedo al futuro – o a la ausencia de él -, creemos firmemente que el cambio de paradigma debe pasar por respetar a todos nuestros compañeros de planeta. ¿Y cómo se consigue eso? En primer lugar, conociéndolos.

Niños, niñas y adolescentes, bienvenidos

Observar la vida en todas sus formas desde el respeto y sin sentirnos el centro de todo es un acto revolucionario que nos cambia por completo. Ya sea visitando a los habitantes rescatados del Refugio Empatía, conociendo a los animales silvestres o bien observando sus rastros en el maravilloso entorno del Parc Natural de la Garrotxa.

Por ese motivo, nuestro público objetivo sois en primer lugar las familias, que juntas queréis compartir experiencias en la naturaleza. Sabemos que no se puede proteger aquello que no se aprecia, por eso queremos acercar la naturaleza a nuestros huéspedes y visitantes. A través del refugio, del huerto ecológico, del bosque, de alimentos plant based, de nuestras actividades o talleres, cada cual encontrará su hilo del que tirar para adentrarse más en el mundo natural.

Muchos de nuestros mejores recuerdos de infancia están ligados al campo y al bosque. Quizás por eso le demos tanta importancia a que nuestro hijo experimente en la naturaleza. Como es importante apreciar aquello que debemos defender, cada sábado nos acompaña un educador ambiental para explorar con él o con ella los secretos del entorno natural.

Richard Louv, escritor, conservador y educador, advierte del déficit de naturaleza que padecen los niños actualmente y los trastornos físicos y psicológicos que conlleva. Conscientes de ello, en Mas Campassol buscamos crear bonitos recuerdos en la naturaleza, que vuestros hijos evoquen en un futuro, confiamos que más concienciado con la sostenibilidad y la protección de nuestro planeta.

Algunas de las actividades que ofrecemos con nuestro educador ambiental son:

  • Rastreo de fauna silvestre en el bosque
  • Identificación de insectos, aves y flora
  • Elaboración de comederos para aves
  • Actividades en el huerto eco-pedagógico
  • Gincanas con elementos naturales del entorno

A través de las experiencias y de las emociones se construyen aprendizajes valiosos y para siempre. Queremos el sentimiento de pertenencia con el entorno lleve a los más pequeños a proteger mejor la naturaleza y sus habitantes, el objetivo final de nuestro proyecto.

Más adelante, las actividades con niños se ampliarán a colectivos en situación de vulnerabilidad, sabemos que en muchas ocasiones los animales son los mejores catalizadores para mejorar los estados emocionales.

Aunque no os hospedéis en Mas Campassol, la Fundació Empatia os ofrece la posibilidad de conocer el refugio, el huerto eco-pedagógico y las instalaciones ecológicas.

Los otros animales

Los primeros habitantes de nuestro pequeño gran refugio de animales considerados de producción ya están aquí. Las gallinas Vanesa, Carolina, Sandra, Xina y los gallos Charly y Ari disfrutan de una vida tranquila en la que tratamos de respetar su naturaleza, tan modificada genéticamente por el ser humano.

Los animales son un pilar fundamental de nuestro proyecto común con la Fundació Empatia. Porque ellos y ellas son nosotros. Sabemos que sin una biodiversidad rica y sana nuestra especie no tiene ninguna posibilidad y queremos empezar por transmitir a las generaciones venideras el respeto por los animales, empezando por los “de granja”, los más maltratados, tanto en número como en intensidad de su sufrimiento, y siguiendo por los silvestres, con los que compartimos nuestro entorno.

Justamente por la degradación de este último debido a la acción humana, queremos favorecer el retorno y la protección de la fauna autóctona. Convertirnos en un área protegida en la que no se puede cazar fue nuestra primera gran medida para preservar la fauna creando 43 hectáreas de paz y cobijo para los animales, transformando así la finca en un refugio de fauna silvestre.

Protegemos zonas de alto interés faunístico, como las pozas, restringiendo el impacto de visitas y otros usos, que puedan dañar la dinámica natural de estas zonas con alta riqueza ecológica. Construimos muros de piedra seca y majanos; estás técnicas ancestrales de la agricultura, favorecen la biodiversidad, dando cobijo y un lugar idóneo para la hibernación de múltiples especies de pequeña fauna, como insectos, reptiles y micro mamíferos entre otros.

Creamos refugios para la fauna silvestre con nuevas zonas de agua para abrevaderos, plantamos vegetación que favorezca la alimentación de aves, mamíferos y micro mamíferos y colocamos cajas nido que contrarresten la pérdida de sus hábitats por la tala de árboles y la propagación de monocultivos de la zona.

Somos naturaleza

Dice la filósofa Marta Tafalla que los seres humanos nos hemos acostumbrado a ver la naturaleza como un decorado, puesto ahí únicamente para nosotros, para que podamos hacernos un selfie.

El hecho es que somos naturaleza, formamos parte de esta red tan delicada y compleja con la que parece que nuestra especie quiere acabar. Mas Campassol está ubicada en un entorno que no solo es nuestra casa, es el hogar de cientos de miles de animales y plantas. Respetar ese hogar, conocerlo y así poder tratarlo con la consideración que se merece, es la tercera pata de nuestro proyecto. Por ello es tan importante para nosotros proteger y favorecer la biodiversidad. Aparte de las actuaciones ya comentadas, hemos plantado una gran variedad de especies antiguas de frutales autóctonos y ecológicos.

El bosque es uno de los grandes protagonistas de Mas Campassol; además de envolver la masía con su hermosura, es el hábitat de numerosa flora y fauna. Numerosos senderos de variada intensidad, así como los baños de bosque que ofrecemos con Selvans*, la asociación más importante de Cataluña en la protección de bosques maduros, os ayudarán a conectar con la naturaleza y a reconectar con vosotros mismos.